Luego de un nuevo dato de inflación a la baja según INDEC y antes de abrirse la crisis por la destitución del senador empelucado Kueider, el presidente Milei hizo su balance anual por cadena nacional. La relativa estabilidad –en base al empobrecimiento popular– le dio margen para mostrarse optimista. Pero su exitismo pierde consistencia cuando se exponen sus medias verdades o mentiras evidentes, y se desbarata su relato. Puntualizamos algunas cuestiones:
1 El “sacrificio” no es de “todos”. Mientras los jubilados, trabajadores estatales, informales y también los registrados privados perdimos poder adquisitivo, hubo monopolios y bancos que aumentaron sus ganancias. No sólo las prepagas (beneficiadas con la desregulación del gobierno), sino también las alimenticias como Arcor (+657% de ganancia) o Mastellone (+2050%), petroleras como Tecpetrol de Paolo Rocca (+1860% de ganancia), los laboratorios de medicamentos como Richmond (+1325%), energéticas como Edenor que nunca dejaron de recibir subsidios (+727%). (Ver “La ‘casta’ está de fiesta”, Al Frente Nº 202)
2 No hay “crecimiento del poder adquisitivo de los argentinos”. Que el salario básico es de 1.100 dólares fue la mentira grotesca del discurso. Los salarios siguen en promedio un 25% detrás de la inflación respecto del gobierno de Alberto Fernández. Esto aún dando como cierta la mentira del INDEC de que seguimos gastando lo mismo en servicios y transporte, cuando todos verificamos en el bolsillo que no es así y hasta el Observatorio de Tarifas y Subsidios IIEP (UBA-Conicet) constató que se duplicó dicho gasto en proporción al salario. (Ver “Los salarios están por detrás de la inflación”, Al Frente Nº 202)
3 “La recesión terminó”(¿!?). Pero el propio INDEC reconoce que la actividad económica sigue un 3% o más por detrás del año pasado (según su Estimador Mensual de Actividad Económica), aún contando a favor que este año no hubo sequía.
4 “Hace exactamente un año la tasa de inflación viajaba a un ritmo del 17 mil porciento”… La inflación mensual según el INDEC se mantuvo por debajo del 4% en los últimos tres meses. Pero considerada anualmente, con Milei resultó ser de 166% en sus primeros 12 meses: aún por encima del 161% de inflación anual con que terminó Alberto Fernández. La gran diferencia ha sido la licuación de los ingresos populares.
Luego habría que mencionar algunos hechos que Milei pretende ocultar:
5 La pobreza llegó al 53% con Milei, un aumento del 10% respecto del gobierno anterior (datos según INDEC).
6 Con Milei se perdieron 140 mil puestos de trabajo registrados según datos SIPA. Medida en general, la desocupación subió al 7,6% (1,4% más que un año antes).
7 El consumo cayó un 20% en noviembre respecto del mismo mes de 2023.
8 Con la eliminación de los remedios gratuitos para todos los jubilados del PAMI se ahorran 400.000 millones de pesos por año. Apuntan a un genocidio que además, mediante la eliminación física de los beneficiarios de jubilaciones y pensiones, les ahorre mucho más.
En definitiva, la desaceleración de los precios se da básicamente porque ya están al nivel que siempre quisieron los monopolios: al que maximiza su ganancia a costa del empobrecimiento del pueblo. Con la caída del consumo lograron bajar la demanda de importaciones y el superávit comercial. Pero no hay elementos suficientes para afirmar que la crisis recesiva haya terminado.
Publicación original: https://cr-alfrente.org/sobre-la-estabilidad-empobrecedora-que-glorifica-el-gobierno/