Ya hay otro camino

El 7 de septiembre con Fuerza Patria derrotamos a Milei en la Provincia de Buenos Aires. Ahora: Profundizar la lucha contra los vetos y el plan de Milei para derrotarlo en octubre y con el pueblo en las calles terminar con su gobierno y cerrarle el paso al recambio reaccionario. Por un gobierno y un programa popular para una salida en favor de los trabajadores, la producción nacional y la Patria. Con Axel Kicillof, el MDF, la unidad en Fuerza Patria y el triunfo en Provincia de Buenos Aires, hay un camino abierto y estamos en marcha.

El triunfo de Fuerza Patria en las PBA del domingo 7 de septiembre por más de un 13% de diferencia del Fuerza Patria (47,3%) sobre La Libertad Avanza (33,7%) significó un duro golpe para el gobierno de Milei y abrió una nueva situación política. Fuerza Patria se impuso en 104 municipios y 6 de las 8 secciones electorales por más de un millón de votos.

El gobernador Kicillof sale fortalecido, proyectando su liderazgo nacionalmente desde el gobierno bonaerense con este contundente triunfo en la Provincia. Acertó en apostar a la alianza con los intendentes que nucleó en el MDF (Movimiento Derecho al Futuro) y en desdoblar las elecciones para llevar a Milei a un terreno real y palpable en la confrontación. También en apostar a la unidad de Fuerza Patria y a poner candidatos representativos para encabezar las principales secciones como Gabriel Katopodis y Verónica Magario. Se identificó con la lucha de los jubilados, el Garrahan, de discapacidad y denunció el recorte a las provincias. Así el voto tuvo un sentido concreto: darle rienda suelta a la motosierra de Milei o defender a los bonaerenses y pararle la mano a la política del gobierno nacional.

Con la política recesiva, de libre importación y contra la producción y el trabajo nacional llevada adelante por Milei y Caputo, se llegó a la elección con salarios devaluados y un tendal de cierres y despidos. Arriba de eso, el “3% de Karina” quebró una parte del voto “libertario” engañado de que “el esfuerzo y el sufrimiento servían para un futuro mejor”,  y que ahora no fue a votar, o votó a otros.  En el siguiente cuadro se puede apreciar comparativamente con resultados anteriores:

Fuerza política 2021 2023 2025
FT/UP/Fuerza Patria 3.368.295 38,5% 4.330.482 44,9% 3.820.119 47,3%
Juntos-PRO 3.480.198 39,8% 2.563.582 26,6%
La Libertad Avanza 656.487 7,5% 2.367.294 24,6% 2.723.710 33,7%
UL/UYL/PL 223.698 2,7%
Somos 424.671 5,6%
POT/NA/HEC 307.837 3,5%
FIT 596.723 6,8% 373.819 3,9% 353.287 4,4%
Blancos 284.346 3,1% 980.563 9,2% 587.451 6,7%
Votantes 9.133.235 10.676.947 8.766.845
Electores 12.762.724 14.059.933 14.376.592
Participación 71,5% 75,9% 61,0%

Del cuadro se ve que fuerzas como La Libertad Avanza (LLA) y Juntos, que sumaban el 46% en el 2021 y el 51% en el 2023, fueron dispersas en ocho o más agrupamientos que suman el 46% en 2025.

El gobierno se había envalentonado con el préstamo del FMI y el respaldo de Donald Trump que influyeron en esos días para el triunfo de Manuel Adorni con un 30% en CABA, a partir de lo cual sometió al PRO para la elección bonaerense y de octubre. Pero después, las elecciones de Formosa, Santa Fe y recientemente Corrientes preanunciaron su debilidad creciente.

Se llegó a las elecciones del 7 de septiembre con una fractura de los sectores de las clases dominantes que habían apuntalado al gobierno de Milei en 2023 y 2024 votándole la Ley bases y parte de los vetos; y que conformó Provincias Unidas nucleando a un grupo de gobernadores tras Juan Schiaretti, como el gobernador cordobés Llaryora, el santafesino Pullaro y el chubutense Torres entre otros, con Arcor, Clarín, La Nación, y Techint atrás.

Tras la derrota bonaerense, Milei ha ratificado el rumbo vetando la Ley de ATN (Adelantos del Tesoro Nacional) de las provincias, la del Garrahan y la de financiamiento universitario. Y ha presentado su proyecto de reforma laboral. Además plantea incumplir la Ley de Discapacidad ratificada por el Congreso contra el veto presidencial. Convocó a una reunión a los gobernadores a la que solo concurrieron 3 de los 24. Y el lunes presentará su Ley de Presupuesto 2026, frente a lo que probablemente surjan otros proyectos de presupuesto opositores. Además, el Congreso constituyó la Comisión Investigadora del fraude $Libra y ya ha citado a Karina Milei.  También se apresta a modificar la ley que reglamenta los DNU, que de aprobarse impondrá la necesidad de aprobación de ambas cámaras en noventa días, lo que limitará drásticamente el modus operandi del Milei.

El gobierno está golpeado, con internas y filtraciones fuera de control y se debilita. El dólar ya llega a la banda superior y crece el riesgo país mostrándose insostenible. Pero consideran que reafirmándose en su diatriba de defensa del equilibrio fiscal contra “el populismo” puede conservar aun un caudal de votos. Pero en octubre se le presentan 24 elecciones en las que solo va aliado a gobernadores en 3 distritos y debe confrontar entonces con múltiples oficialismos provinciales, no solo “el kirchnerismo”. De todas maneras, ha resuelto reafirmarse en la suya y acelera con los vetos de ATP, universidades, Garrahan y el Presupuesto 2026 para marchar a matar o morir en octubre. Pero con menos de un 30% de los votos, su gobierno sería insostenible.

Por eso ya se dispararon planes de recambio reaccionario desde sectores de clases dominantes como Paolo Rocca de Techint, Pagani de Arcor, Clarín y La Nación e inclusive Macri. Planes que prevén desde la renuncia de Milei y el reemplazo por la vice Villarruel, o una destitución por Juicio Político y la elección de un presidente provisional designado por la Asamblea Legislativa, para lo que sueñan con Schiaretti y los gobernadores de Provincias Unidas que votaron la Ley Bases y también van por la reforma laboral y las privatizaciones dentro del respeto y los acuerdos con el FMI.

Por eso hay que profundizar la lucha, ahora contra los vetos de Milei y toda su política para derrotarlo en octubre y con el pueblo en las calles terminar con su gobierno, cerrándole el paso a los planes legislativos de recambio reaccionario, imponiendo nuevas elecciones. Por un gobierno popular con un programa que asuma las necesidades de los trabajadores, la producción y la Nación Argentina para romper el plan de primarización económica y saqueo monopolista, precarización laboral y pauperización social, endeudamiento y dependencia imperialista a la que estamos sometidos. Con Kicillof, el MDF, la unidad en Fuerza Patria y el contundente triunfo en Provincia del 7 de sptiembre, hay un camino abierto y estamos en marcha.